El otro día buscando información sobre el ADN, por “causalidad”, encontré un documento http://www.somosbacteriasyvirus.com/transformacion.pdf de Máximo Sandín, profesor de biología (recién jubilado después de 35 años) de la autónoma de Madrid. Me pareció muy interesante todo lo que decía. Lo cual me llevó a visualizar algunos de sus videos en http://www.somosbacteriasyvirus.com/videos.htmlcom/videos.html. (Los recomiendo, son muy interesantes, habla básicamente de rehacer las teorías biológicas y evolutivas, en base a las nuevas observaciones. Porque estas últimas no se corresponden con las teorías vigentes del funcionamiento y forma de transcribirse las instrucciones del ADN).
Sus reflexiones me hicieron pensar que, quizás, el ver en cualquier sistema “caos (desorden)” o “cosmos (orden)”, solamente depende del punto de vista desde el cual se observa.Por ejemplo, si observamos, es decir, ponemos la atención en una única “célula” de un organismo, veremos que tienen miles de reacciones químicas por segundo, y que parece comportarse de forma caótica y sin sentido. Pero, si la vemos en conjunto con el organismo al que pertenece, está realizando las funciones adecuadas para “colaborar” con el mantenimiento del organismo.
Lo mismo puede ocurrir si observamos en detalle el flujo sanguíneo en una sección de una arteria (conjunto de elementos: hematíes, leucocitos, plaquetas, etc.), parecerá un movimiento caótico y sin sentido. Sin embargo, si observamos el conjunto del organismo al que pertenece será, simplemente, parte del “equilibrio vital de dicho organismo”. Como dice el profesor Sandín, los depredadores se comen las presas (visión local y restringida), pero en un nivel superior, hay una cooperación de la biodiversidad que mantiene un equilibrio ecológico. Es decir, la Naturaleza busca siempre el equilibrio, no la “depredación egoísta” (algo que solo es aplicable al ser humano), aunque pueda valerse de la “depredación” (sin connotaciones egoístas), en determinado nivel, para alcanzar ese equilibrio.
Este hilo de pensamiento, nos puede llevar a plantearnos las siguientes cuestiones:
¿Podríamos postular que: donde vemos “desorden”, simplemente necesitamos cambiar nuestro punto de vista, a un nivel superior (o más profundo), para buscar el “orden”?
¿Siempre que consideramos algo “azaroso” o sin orden, puede ser que estemos observando desde un punto de vista no adecuado?
¿Es posible acertar en nuestras conclusiones, cuando estamos observando desde un punto de vista no adecuado, es decir, cuando percibimos algo como azarosos o sin orden?
Esta última no lleva al planteamiento: ¿vemos en la naturaleza del universo “visible” que hay evidencia de un orden intrínseco, o por el contrario pesamos que hay un caos azaroso?
En el primer caso, podremos buscar leyes (la base de la investigación científica relación causa-efecto). En el segundo conjeturar probabilidades y hacer análisis estadísticos.
Mi postura es la del primer caso, y con la certeza, de que hay observaciones y experiencias, que nunca podrán ser probadas con experimentación material objetiva.
Imagenes tal y como aparecen en internet.
Tu opinión es muy parecida a la de Heráclito (es increible la vigencia de estos sabios), se trata de buscar el orden por detras, o por encima del caos. Aunque posiblemente ese aumento de nivel tenga que ser inteligible (es decir un orden racional)
ResponderEliminarMe ha recordado aquello de que si nos centramos en el árbol no podremos ver el bosque.
ResponderEliminarYo creo que todo obedece a un plan armónico, que incluye el caos dentro.
Efectivamente Enric, parece increíble la vigencia de estos sabios, teniendo en cuenta que (según las evidencias) la única “herramienta” que tenían 500 A.C, era - la observación (interior y exterior)-.
ResponderEliminarHoy en día, con toda nuestra “tecnología”, solamente estamos “confirmando experimentalmente” las líneas de pensamiento que ellos marcaron.
Respecto a que sea inteligible ese “orden” detrás del “desorden caótico”, lo será, cuando tengamos la capacidad de “entender racionalmente” ciertas verdades, que hoy por hoy, están fuera de nuestro intelecto. Ese hecho lógicamente, será condición necesaria para el entendimiento. Pero no será condición suficiente, como para que puedan ser probadas “dichas verdades” mediante experimentos materiales objetivos.
Coeliquore, coincido contigo al cien por cien. Todo este universo dual, obedece a un plan armónico tendente al equilibrio, cuyo “fuerza de empuje” es el caótico desequilibrio.
ResponderEliminarCon la observación del conjunto, parece evidente que la parte es al todo como el desorden es al orden. Observar la parte al margen del todo nos da una visión inconclusa de su función. Un corazón es sólo un músculo que se contrae rítmicamente, y su función sólo tiene sentido al aplicarla a un todo, un cuerpo. Es más, sólo comprendemos la importancia que tiene la parte cuando la separamos del todo. Sólo comprendemos la importancia que tiene un corazón cuando lo separamos del cuerpo y todo éste fallece. Un todo depende enteramente de cada una de sus partes, partes que por separado nos parecen un "caos" sin sentido dentro de un "cosmos" con sentido.
ResponderEliminar::: caos y cosmos, uff, rien ne va plus
ResponderEliminarsupongo que la perspectiva cosmológica daría un significado, otro la biológica, y no quiero pensar ya en las posibles inferencias aplicables a la vida humana
“en ese delicado laberinto no me fue dado penetrar”, escribió borges al hilo de las ideas platónicas
la deformación profesional me lleva, antes de nada, a preguntarme por los significados de los vocablos, y he tenido un arrebato monista: el caos es un contrafáctico, un imposible, pues el cosmos es lo que es y su opuesto es la nada y no el caos
luego me ha dado el punto heraclitiano (que cita enric), y me he dicho: todo fluye: desde el caos al cosmos; pero esto no tiene mucho sentido, el flujo puede estar sujeto a leyes, cosmos, y también he empezado a sospecharme haciendo un mix semántico con las palabras, esto es, un potaje
mirad lo que os digo, acabo de oír en la radio a una eminencia en física hablando del tiempo y otras zarandajas cósmicas, y de que no tenemos ni zorra de la materia obscura, ésa que ocupa casi todo, por lo que aquí los barandas de la superfísica no exabruptan, en el mejor de los casos, más que metáforas
qué gracia, la cosmología mamándole las tetas a la poesía
socio, no le busques los tres pies al gato, de todos es sabido que el gato en cuestión es bizco y del foro, se apoya sobre una tortuga, ésta sobre dos toros y éstos llevan en las astas colgando varios universos paralelos
en uno de ellos las hermanas williams nos masajean los pies :::
Pues sí, Crisc. A los barandas de la superfísica a veces sólo nos queda el recurso de la metáfora. Pero tú has captado la sutil y aguda idea que he lanzado ¿verdad? Pues de eso es lo que se trata, jeje!!
ResponderEliminarEstoy contigo totalmente Anandamida. Un todo depende de todas y cada una de sus partes. Desde un punto de vista analítico, podemos observar las partes separadas, pero teniendo en cuenta siempre, que estas, solo tienen razón de “ser” dentro de su sistema, y por lo tanto, no hay que perder de vista el conjunto. Este pensamiento lógico se puede llevar así, integrando sistemas, hasta el “infinito”.
ResponderEliminarCrisC, mi opinión personal, es que el “caos” es simplemente la apariencia que nos muestras el “cosmos” en transición de un estado a otro (de ahí el fluir, y el orden implicado).
ResponderEliminarEfectivamente al final, los “barandas de la superfísica”, juegan con “ideas y teorías matemáticas (entelequias)”, con las que solamente pueden hacerse algo inteligibles a nuestra “pequeña conciencia lógica” a través de las metáforas. Por lo tanto, te tengo que dar la razón “la cosmología bebiendo de la poesía”.
Pero nuestro impulso, es intentar “conocer”, entender,…