El que estemos
acostumbrados a que “todo eso” está ahí, . permitiendo que podamos “estar aquí”,
y que seamos “conscientes” de todo ello, no debería de hacernos creer que es “normal”
por lo natural que es. Porque eso, que por no prestar la suficiente atención, lo vemos tan normal, es un verdadero milagro.
Obsérvate a ti mismo, que poco controlas
conscientemente. “Tus células” están ahí, realizando miles de reacciones químicas
por segundo, trabajando en colaboración entre ellas para, crear funciones (órganos)
que a su vez colaboran entre ellos en sistemas. El corazón, la respiración, las
digestiones, todo realizando sus funciones en sincronía, y sin que nos demos
cuenta en absoluto de nada de ello (solamente tomamos conciencia, cuando algo deja
de funcionar como la hacía).
Nosotros, los “cuasi seres humanos” que en
nuestra arrogancia, nos creemos que sabemos mucho (ahí está nuestra ciencia “que
lo demuestra”) y que lo tenemos “casi todo” claro, sin embargo, no somos capaces de controlar ni
un uno por ciento de “nuestro” propia organismo. Y aunque aparentemente podemos
explicar el “cómo” de algunas cosas, no conocemos “casi nada” de la esencia de las
mismas.
Es tan difícil llegar a la conclusión, que si
no fuera porque “algo” mucho más “inteligente” que nuestra pequeña conciencia
lúcida, coordina en armonía (a pesar nuestro, que intentamos des-armonizar con
nuestra inconsciencia) toda esta estructura que nos da soporte en este mundo
físico-material, no duraríamos “vivos” ni un micro-segundo.
Un camino para tomar consciencia de esa “inteligencia”
es la meditación. Y la reflexión por supuesto de lo observado y "vivido", tanto hacia
fuera, como hacia dentro (en la
meditación)
Imágenes tal y como aparecen en internet
Anónimo (nuevamente)
ResponderEliminarMe conduces a pensar en lo siguiente:
Un mundo atómico con partículas girando entre si, dentro de una molécula que a su vez compone una célula, esas células constituyen órganos y consecuentemente un cuerpo humano.
Todo en movimiento, todo girando uno dentro del otro.
Después tenemos ese cuerpo humano que se mueve en un entorno
donde se está realizando la misma ecuación en sus diferentes lugares y diversos cuerpos humanos.
Es decir: en diversas escalas,hogar, comunidad, región, país, el planeta.
Aquí empezamos a niveles astronómicos: el planeta tierra moviendose
en una orbita alrededor del Sol junto a los otros planetas dentro de un sistema solar que a su vez está en las entrañas de una galaxia la cual se mueve y gira aldededor de otras galaxias dentro de un Universo que a su vez gira y se mueve junto a múltiples Universos.
Sencillo. Simple. "Normal". ¡ Grandioso !
Tiene que haber "alguien" "inteligente"
que mantiene un orden dentro de todo este proceso y que ha hecho sus ajustes finos en el microcosmos y en el macrocosmos para que todo esto
que parece normal se mantenga fluyendo.
Así parece ser amigo anónimo. En este plano físico-material todo es movimiento (vibración). Pero además de lo que has explicado (que sería lo “visible”), habría que tener en cuenta lo que no es visible a nuestros sentidos “normales”, es decir, lo que “podría ser” pura energía multidimensional, sin lo que nosotros denominamos “masa” (digo podría, para no ser categórico ante los materialistas puros, ya que fácilmente se puede argumentar el “demuéstralo” y lo de la “carga de la prueba” – y por supuesto con las reglas aplicables a la materia-)
EliminarRespecto a “alguien inteligente”, no me gusta utilizar el concepto “alguien”, porque induce a pensar en “algo antropomórfico”. Prefiero utilizar el concepto “Ser”(o seres) porque simplemente “son”. Como dice el Tao: El Tao es innombrable, porque en el momento que lo nombras, deja de ser el Tao”.
Una inteligencia? Te refieres a Dios? O a algo no religioso, infefinido, superior? No nos hace ninguna falta, somos así de limitados, y punto. Y desapareceremos como hemos aparecido, la inteligencia se llama selección natural, pero no es tan inteligente, mira a quien ha puesto al mando de esta nave, a una especie de tarados capaces de autodestruirse! Inteligencia? No se donde ves esa inteligencia!
ResponderEliminarEnric, el cómo llamemos esa “inteligencia” para referenciarla, a mi modo de ver es indiferente, porque claramente es algo indefinido (no se puede definir).
EliminarPor supuesto que somos limitados, precisamente por eso, nos hace falta “esa inteligencia” que permite que todo funcione (y no me refiero esa pequeña inteligencia intelectual “nuestra” que nos creemos que entiende todo).
En fin, si tú no ves inteligencia en el universo y especialmente en el “mecanismo de la vida”, y crees, o te da más seguridad creer, que toda la evolución (que es evidente que la evolución existe) es “casual”, pues nada, ahí está nuestra libertad de creer lo que queramos.
Eso sí, estoy de acuerdo contigo, que hay multitud de tarados (llamados inteligentes) capaces de autodestruirse en su inconsciencia.
Concepto aceptado "Ser".
ResponderEliminarQuiero además decir por este medio que me gusta mucho este blog.
Me dediqué a leer todas las introducciones y comentarios desde el comienzo. Me resulta todo muy interesante.
Saludos a todos.
Me alegra amigo anónimo que te guste el blog. Si lo has leído todo, has leído un buen rato ;-)
EliminarSaludos
Prestar atención. Es uno de los vectores férreos del “discurso de Oriente”.
ResponderEliminarNunca he acabado de enteder la trascendencia que le dan. Algo se me escapa. Fijo.
“Perfección”… Es una categoría relacional. Quiero decir, se entiende en relación a otra cosa. ¿Qué otra cosa es imperfecta en la Naturaleza? Es un todo. Ni perfecto ni imperfecto. Es lo que es.
Una brizna de hierba tiene tanta armonía en su ser como pueda tenerla una ballena corcovada, unas salinas, el sistema endocrino o la constante gravitatoria. Son hechos, sin más, resultado de procesos naturales no de milagros.
Todo maravilloso, no me cabe duda.
La Beyoncé, por ejemplo. A ver quién refuta esto (que no tenga pluma, claro).
¿Cuasi humanos? Sabemos mucho y cuanto más sabemos, sabemos cuánto nos queda por saber. De nuestro organismo, por ejemplo, no sabemos muchas cosas, pero al organismo se la trae al pairo. Sigue funcionado.
A no ser que nos empeñemos en meterle tralla (tabaco y esas cosas, vino peleón en envases tetra brik, cine de barrio).
Nuestra pequeña conciencia es la cosa más maravillosa del Universo. Con toda su inconmensurabilidad éste no es consciente de sí mismo, nosotros lo somos.
Meditación… Me cuesta. Cuentan maravillas. Cuenta, galán.
Crisc, quizás el no “ver” la importancia que tiene la observación (prestar atención), te lleve a ver el mundo como lo ves. Ves “hechos sin más” en todo lo que ves.
Eliminar“Nuestra “pequeña conciencia, no es nuestra (pero eso crees, precisamente por no prestar atención). ¿Tú puedes controlar algo de tu propia existencia vital? Intenta simplemente NO respirar (ya no te digo alterar cualquier otra función “casual y aleatoria” de tu organismo como la digestión, la circulación, el metabolismo, etc..)
Es el propio universo, que a través nuestro va tomando conciencia.
La primera de las fotos la tengo en una de mis post: precisamente trataba de que somos un todo con el universo y que no hay muerte, si no más vida después de la vida. Pero lo puse en forma de relato porque no lo tengo del todo claro, aunque me gustaría.
ResponderEliminarSi, es una foto muy sugerente que invita a “pensar sobre la totalidad”.
EliminarPienso que la observación, e incluso el análisis racional, nos lleva a la “confirmación” de esa “intuición” de la continuidad del “Ser” después de la muerte (y por supuesto antes del nacimiento). Sugiero visualizar el “link” http://www.gamisassociacio.org/video/Dr-Manel-Ballester/
La muerte es lo opuesto al nacimiento. Aunque nuestra “personalidad egoica”, ante su posible disolución en ese trance, nos hace dudar de lo casi evidente que es la afirmación: la vida es una, continua y eterna (solamente varía la forma energética de manifestarse)
COMO DESARROLLAR INTELIGENCIA ESPIRITUAL
ResponderEliminarEN LA CONDUCCION DIARIA
Cada señalización luminosa es un acto de conciencia.
Ejemplo:
Ceder el paso a un peatón.
Ceder el paso a un vehículo en su incorporación.
Poner un intermitente.
Cada vez que cedes el paso a un peatón
o persona en la conducción estas haciendo un acto de conciencia.
Imagina los que te pierdes en cada trayecto del día.
Trabaja tu inteligencia para desarrollar conciencia.
Atentamente:
Joaquin Gorreta 55 años
Completamente de acuerdo contigo Joaquin.
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